Luego del partido por Copa Libertadores entre Peñarol y Rosario Central, que significó la clasificación de los uruguayos, los hinchas argentinos emprendieron el regreso, pero se encontraron con demoras al momento de cruzar por el puente San Martín.
La situación se dio cuando los buses llegaron sobre las 5 de la mañana al paso fronterizo y pasada unas 2 horas apenas se habían despachado 2 de los 23 ómnibus con hinchas. Esto originó malestar en barras de Central, que quisieron cruzar caminando el tendido bi nacional algo que está prohibido.
Los trámites de salida de Uruguay son realizados por funcionarios argentinos, y las demoras hicieron impacientar a los parciales «canallas». Debido a la situación se pidieron refuerzos a personal de Prefectura y la Policía aunque aclararon que no hubo incidentes.
«Eran 1200 personas en el lugar que estaban impacientes, pero se coordinó y a media mañana se solucionó» confirmó una fuente del área de control integrado.