Con una victoria ante Esparta y el resto de derrotas anoche el resultado clásico
desencadenó en que Pablo Garbarino ya no es el técnico funebrero, presentó la
renuncia y la directiva lo aceptó. Todavía no hay sustituto.


Con una victoria ante Esparta y el resto de derrotas anoche el resultado clásico
desencadenó en que Pablo Garbarino ya no es el técnico funebrero, presentó la
renuncia y la directiva lo aceptó. Todavía no hay sustituto.

