Robert Urgoite es integrante del grupo Tierra Negra, además es gestor cultural y psicólogo social. Robert plantea que existe una desvalorización de las expresiones populares en carnaval y que se manifiesta en la falta de apoyo estatal, “la desvalorización del carnaval se traduce en la falta de planificación y en el hecho de que no se incluye en la agenda cultural como Noviembre en Río Negro o las elecciones de las reinas”. Para Urgoite existen jerarquías en la cultura donde ciertas expresiones son valoradas más que otras. No ha habido una “llamada” que haya fracasado, pero no se le otorga el valor que merece el candombe como “patrimonio vivo”, ni se respeta la legislación vigente que demanda el apoyo del Estado al candombe, asegura Robert. Al entrevistado le resulta incomprensible que a esta altura todavía “estemos luchando por la legitimación del Carnaval y dando razones para ello”.
Para Urgoite “el carnaval, es una fiesta legitimada por el pueblo desde hace 200 años, es un emblema de nuestra cultura. Aunque históricamente ha sido una de las festividades más atacadas, nunca ha dejado de celebrarse debido a su arraigo popular. Es esencial que tenga un presupuesto adecuado, no porque sea una dádiva, sino porque es un derecho. Somos grupos artísticos, igual que los que se contratan para otros eventos”. Robert señala que llega diciembre y para el Carnaval siempre es la misma historia: “no hay plata ni recursos, lo cual no sucede con otros grupos y festivales. Esta situación refleja una marginalización y desvalorización del Carnaval que se manifiesta en la falta de comunicación y negociación vertical con nuestro grupo”.
Robert denuncia que hay una desvalorización de los grupos locales, “siempre se considera que los de afuera son mejores que los de aquí”. En cuanto a las acusaciones sobre la autogestión y la dependencia de los grupos hacia el Estado, señala que, en el caso de su grupo, “lleva gestionando desde 2009, trabajando todo el año y no depende del Carnaval”. En cuanto a la organización del carnaval dice que “la organización autogestiva del Carnaval es un desafío, ya que requiere generar una grupalidad capaz de organizarse. La organización auto gestiva del carnaval funcionaria si los grupos pudiesen priorizar el trabajo cooperativo por encima de los intereses propios y esto no está dado por algunas grupalidades. Actualmente, nuestra capacidad para organizarnos está muy fragmentada; de hecho, el año pasado prácticamente nos expulsaron. No hay ambiente, compromiso ni honestidad para su organización”, finaliza el entrevistado.

Lic. Matías Milán