Fray Bentos celebra hoy el primer aniversario del centro Ni Silencio Ni Tabú, un espacio dedicado al acompañamiento emocional de adolescentes y jóvenes. Carolina Coronel, coordinadora del programa, destacó la satisfacción por el trabajo desarrollado durante este primer año, marcado por un aumento constante en la concurrencia y una sólida articulación con distintas instituciones del medio.
El centro se consolidó como un “espacio seguro y amable”, donde se han realizado más de 55 actividades y talleres dirigidos a grupos de liceos y UTU, abarcando temáticas como orientación vocacional, género, arte y escritura creativa. Asimismo, más de 50 jóvenes reciben semanalmente atención psicológica individual.
Uno de los avances más significativos ha sido la llegada del servicio a zonas rurales como Grecco y Young, donde los adolescentes pueden acceder a sus sesiones de manera virtual. Actualmente, también funcionan dos grupos terapéuticos: uno de danzaterapia y otro denominado Dándole Lugar.
Coronel remarcó que, si bien no existe un patrón único en las problemáticas que se presentan, la “soledad” aparece como un sentimiento recurrente entre los jóvenes, aun en un contexto de hiperconexión. En ese sentido, subrayó que el objetivo del centro es derribar la idea de que la salud mental se limita a la ausencia de enfermedad, promoviendo espacios seguros y la presencia de adultos que acompañen, escuchen y protejan.




























