El edil del Partido Colorado, Juan Serres, expresó una postura crítica tras la presentación del proyecto de presupuesto departamental enviado por el Ejecutivo, que comenzó a ser analizado por las distintas bancadas de la Junta Departamental. Según indicó, la primera lectura de la propuesta genera preocupación y no contiene cambios sustanciales respecto a presupuestos anteriores.

Serres señaló que esperaban “novedades más importantes”, pero que el planteo mantiene una línea similar a la gestión anterior. En ese sentido, fue enfático al afirmar que la bancada colorada no acompañará ningún aumento de impuestos, especialmente aquellos que afecten a los sectores de menores recursos. “Estamos pensando en una contrapropuesta para alivianarle un poco la carga impositiva a la gente, porque la situación del departamento es muy complicada”, sostuvo.

El edil también manifestó inquietud por un eventual aumento indirecto de la Contribución Inmobiliaria a raíz de la actualización catastral. Indicó que los altos niveles de morosidad, que rondan entre el 40 y el 50 por ciento, reflejan que muchas familias no pueden afrontar el pago. En ese contexto, reclamó cambios en el sistema de regularización de deudas, al considerar que las herramientas actuales no han dado resultados.

En cuanto al organigrama propuesto, Serres adelantó que no acompañarán la creación de nuevos cargos, como la Dirección General de Turismo. A su entender, las direcciones generales deben tener un rol más fuerte y cuestionó el funcionamiento actual del área. Como alternativa, planteó la exoneración de tasas vinculadas a la construcción y a la higiene comercial, con el objetivo de incentivar la actividad y no generar más trabas al sector productivo.

Respecto a las obras, el edil lamentó que el proyecto no incluya definiciones claras. No obstante, afirmó que el Partido Colorado está dispuesto a discutir la creación de un fideicomiso a largo plazo para obras estratégicas, como el corralón municipal, el patrimonio Anglo y el padrón 5005 de Las Cañas, buscando fomentar la inversión y la generación de empleo.

Finalmente, al evaluar el primer semestre de gestión del gobierno departamental, Serres consideró que las expectativas generadas no se han visto reflejadas en la realidad. Señaló preocupación por el clima social, la falta de oportunidades laborales y los problemas de salud mental. “Que 3.300 rionegrenses hayan dejado de buscar trabajo es una señal clara de que el departamento está complicado”, afirmó, subrayando que su bancada está dispuesta a colaborar en iniciativas que permitan revertir la situación de Río Negro.