Una mujer de más de 80 años fue víctima de una estafa telefónica en Fray Bentos, luego de que desconocidos la convencieran de que su hijo había atropellado a una persona y que debía pagar una suma de dinero para evitar su detención. La maniobra, que volvió a repetirse en el departamento, derivó en la entrega de $170.000, mientras la víctima permanecía en comunicación constante con el estafador.

Según informó la Policía, la denuncia fue radicada en Seccional Segunda. La adulta mayor relató que recibió un llamado en el que una voz masculina le aseguró que su hijo había protagonizado un siniestro y que, para evitar consecuencias judiciales, debía enviar $300.000 de manera urgente. Bajo presión y en estado de shock, la mujer logró reunir $170.000, suma que efectivamente depositó siguiendo las indicaciones del delincuente.

Horas más tarde, al verificar que todo se trataba de un engaño, familiares dieron aviso a las autoridades. La Policía inició las actuaciones correspondientes para rastrear el origen de la llamada y los movimientos asociados al depósito.

Otros intentos bajo el mismo método

En paralelo, Seccional Primera recibió dos denuncias adicionales, ambas vinculadas a maniobras similares.

En uno de los casos, otra mujer de edad avanzada evitó ser estafada luego de que un desconocido la llamara con el mismo argumento del “falso accidente” e incluso enviara un taxi hasta su domicilio para recoger el dinero. La presencia de un vecino y las dudas que surgieron en el momento impidieron que la maniobra se concretara.

El tercer hecho corresponde a una denuncia por fraude informático. Una vecina transfirió US$ 500 como seña para la supuesta compra de un vehículo ofrecido por WhatsApp, pero tras realizar el pago dejó de recibir respuestas de parte de los negociadores.

Advertencia reiterada

Las autoridades recuerdan a la población que las estafas mediante llamadas telefónicas continúan siendo una de las modalidades más utilizadas y que los adultos mayores suelen ser las principales víctimas. Recomiendan cortar la comunicación ante cualquier pedido de dinero, verificar con familiares y dar aviso inmediato a la Policía.