El Padre Mauro Cardozo informó sobre la llegada de dos misioneras de Guatemala que comenzaran a vivir en nuestra ciudad como parte de un acuerdo. El convenio firmado recientemente entre la diócesis y la congregación de las hermanas de Marta y María, permitirá la llegada de estas misioneras a nuestra ciudad. Este acuerdo implica un compromiso de estadía de al menos tres años, con la posibilidad de renovación hasta seis años, dependiendo de las circunstancias.
El objetivo de la llegada de estas hermanas es no solo realizar tareas específicas, sino también servir como un testimonio de la vida religiosa y la presencia del reino de Dios en la comunidad. Las hermanas, que provienen de una congregación floreciente creada en la década de 1970, han demostrado ser muy activas y versátiles en su labor, especialmente en áreas donde hay escasez de recursos y personal religioso.
El Padre Cardozo ha destacado la importancia de la vida religiosa como un «grito» que recuerda a la comunidad la presencia de Dios entre ellos. Además, se ha comprometido a brindar apoyo espiritual y material a las hermanas, asegurando que su llegada sea un enriquecimiento para la vida de fe en la parroquia.