El instructor Fabián Cordara informó sobre los cambios implementados en el refugio de la Tablada, en donde su participación se enfoca en asesorar y capacitar al personal del refugio para mejorar la vida de los perros que allí residen.
Cordara explicó que el trabajo inicial se ha centrado en la seguridad del refugio, realizando una evaluación de la cantidad de perros y su comportamiento. «Hemos llevado a cabo una evaluación sobre la cantidad de perros presentes en el refugio. También hemos revisado la dieta, que se puede optimizar», comentó.
Uno de los aspectos abordados por Cordara es la identificación de perros potencialmente peligrosos. «Es fundamental priorizar la seguridad del personal que trabaja aquí. No se puede catalogar a una raza como peligrosa sin considerar el comportamiento individual de cada perro», afirmó. Además, destacó la importancia de la socialización adecuada durante el desarrollo de los perros, especialmente entre los dos y nueve meses de edad.
El instructor también mencionó que muchos de los perros en el refugio han estado allí durante años, lo que ha generado problemas emocionales y de comportamiento. «El encierro prolongado puede llevar a una agresividad redireccionada. Por ello, estamos trabajando en la creación de espacios verdes que permitan a los perros desestresarse», añadió.
Cordara concluyó enfatizando la necesidad de un enfoque que contemple tanto la seguridad del personal como el bienestar de los animales, asegurando que se están tomando medidas para mejorar la infraestructura y el entorno del refugio.