Desde la dirección departamental del Ministerio de Desarrollo, su directora Mariana Mascareña explicó que ha habido una baja de quienes concurren al refugio nocturno que demuestra una disminución de personas en situación de calle. «El años pasado iban al refugio entre 8 y 13 personas y este año hubo un pico de 8 o 9 personas, pero hoy están entrando entre 1 y 3 personas».
Al respecto Mascareña agregó que incluso ayer se hizo una recorrida para ver si había gente en calle que no quisiera ingresar al refugio y se encontró a una persona que ha concurrido «pero por diferentes cosas no quiere concurrir» aunque agradeció el ofrecimiento.
Por otro lado explicó que también se detectó en los últimos días a 4 personas en la calle, 2 de ellas mochileros que están recorriendo el país y en caso de ser necesario ya sea por frío o lluvia ingresarían.
La explicación al descenso es que «había poca gente oriunda de acá». Sobre la terminación del servicio, si bien el año pasado terminó el 31 de agosto pero en este 2023 se mantendrá hasta finales de octubre, que es lo establecido con el CLAEH, OSC que está a cargo del funcionamiento.